Mañana es el último día en Melilla ya
Mañana no creo que pueda escribir ya que debo dar visibilidad a mis niños del bosque, en la frontera Este de Europa
Por eso, por ser el último día que escribo sobre Melilla, hoy os quiero hablar de algo importante para mí
Hoy quiero dar visibilidad a través de la Caravana a los otros niños, a los niños del asfalto, LOS MENAS (Menores No Acompañados)
Hoy no subo fotos pero si un video que me cuesta terminar de ver…..
¿Pero que son los MENAS??
Bajo el frío e insensible epígrafe de MENAS, se esconden las historias de niños que se convierten en hombres demasiado rápido. Llegan a España persiguiendo un sueño, se ven envueltos en una burocracia atroz que les engulle, en algunos casos, y cuando cumplen los temidos 18 años pasan a caminar por la difícil cuerda de la supervivencia.
Están solos, sin familia, y de ellos depende su propio camino.
Al menos 540 menores extranjeros no acompañados viven en Melilla, de los que alrededor de 100 viven en las calles de la ciudad autónoma. Ante el desamparo institucional, muchos se juegan la vida tratando de colarse como polizones en los barcos que zarpan del puerto melillense
No hay repatriaciones de menores.
De hecho, uno de los escollos aún por salvar es la puesta en marcha del Registro de Menores Extranjeros. Está aprobado y reflejado en la actual Ley de Extranjería, pero una vez más, papeles y sueños mojados
Aunque la Convención de los Derechos del Niño (1989) deja claro que su protección está por encima del lugar de nacimiento o religión, en Ceuta y Melilla hay quien vacila al referirse a los Menores Extranjeros No Acompañados. Si no se habla de ellos simplemente por su acrónimo, MENA, es fácil que se les refiera como “los hijos de Marruecos” o incluso “los niños de la calle”.
Algunos los ingresan en los CETIs. Pero según datos del informe Harraga, el 92% de los menores que viven en el centro La Purísima manifiestan haber sido tratados de forma violenta… (también se oyen firmes rumores de abusos)
A pesar de que la integridad de estos menores es responsabilidad de la Concejalía de Bienestar Social y de La Purísima, frecuentan espacios donde están “en una total situación de peligro y riesgo”, a merced de las mafias, los pederastas, y el abuso de drogas y alcohol. No hay una preocupación real por la integridad de estos menores desde las instituciones que trabajan en la ciudad. No, no la hay.
Estas criaturas tienen entre 16 y 17 años, aunque los hay más pequeños.
La edad de mi hijo. La edad de mi hijo…
Me lo imagino viviendo solo, en la calle, escondido, señalado, golpeado.
Una noche más me acuesto sin entender porque a tan pocos os importa todo esto.
Ya no sé si me duelen más esas miradas, o la indiferencia de tantos…..
Pero algunos, unxs pocxs, continuaremos, clamando, por ellxs, por todxs….
Caravana Frontera Sur
Contando lo que nadie quiere que sepas